Educación
Educación, Diversidad, Inclusividad
Fundación Díaz-Caneja
Un museo es un instrumento formativo para la sociedad civil y plantea la educación como una plataforma para la producción cultural crítica. La Fundación Díaz-Caneja tiene en cuenta su misión pedagógica a la hora de diseñar los diferentes programas educativos, y así facilitar el acceso de todos los sectores de la sociedad. El objetivo es que el centro sea entendido, tanto por la comunidad educativa como por el público en general de la ciudad de Palencia, como suyo, que sientan que les pertenece. Para ello se han creado programas a la medida de las necesidades e intereses de los diferentes grupos sociales. El fin último del proyecto educativo de la FD-C es establecer lazos directos entre la población y el centro de arte. Concebimos el museo como un espacio diverso e inclusivo en el que la ciudadanía, utilice la práctica artística para observar, pensar y actuar sobre la sociedad en la que vivimos.
El área de educación tiene la tarea fundamental de conectar los contenidos expositivos con la sociedad, por eso es consciente de los cambios que acontecen en la vida diaria para adecuar sus prácticas a las diferentes necesidades colectivas. La FD-C tiene la voluntad de vincularse a su entorno ciudadano y provincial, pero insertado a la vez en una comunidad global, de ahí que diseñe los programas educativos, tanto en su relación con el centro como con la diversidad de la población. El programa educativo de la FD-C utiliza una metodología activa basada en la observación, el diálogo, la investigación y el descubrimiento. El educador o educadora es un “intermediario” de la conversación, es un guía que ayuda a descubrir, fomentando la participación, aprovechando y canalizando las ideas, los conceptos, las propuestas y los comentarios que surgen de la observación directa de las producciones artísticas. Al mismo tiempo, el museo explora aproximaciones interdisciplinares para fomentar en el público un pensamiento crítico y, de este modo, contextualizar la creación artística con su entorno, favoreciendo la experiencia insustituible de la relación directa entre el público y la obra de arte.
Los programas destinados a la educación comprenden visitas guiadas, conversaciones con creadores/as, cursos o talleres. La inclusividad de todas estas acciones manifiesta nuestra voluntad de adaptación a todas las comunidades, priorizando los colectivos en riesgo de exclusión social, dado que en ocasiones, la posibilidad de acceder a los contenidos museísticos queda reducida a ciertos sectores de la población. Partimos de la voluntad de adaptarnos a las necesidades de cada persona para poder mejorar la calidad de nuestra actividad. La formación específica en cuanto al trato de personas con diversidad funcional, además de beneficiar al propio museo convirtiéndolo en un espacio socialmente inclusivo, supone ofrecer una alternativa cultural a un colectivo tradicionalmente poco asiduo a los museos.